Aquella mañana se limpió la boca como tantas otras antes de ir a trabajar. Se despistó y, equivocado, cogió un bote de linimento átono. Durante todo ese día habló sin acento y sin acentos.
Enjuague bucal
Aquella mañana se limpió la boca como tantas otras antes de ir a trabajar. Se despistó y, equivocado, cogió un bote de linimento átono. Durante todo ese día habló sin acento y sin acentos.
Tareas domésticas
Ninguna arruga arruinaría su vida. Junto a las sábanas de hilo y la ropa interior de algodón tenía planchado a su nuevo maridito.
Entrega a domicilio
Era un paquete de células, hormonas, humores y otras piezas materiales. Lo fue ensamblando día a día, con amor con entusiasmo, hasta que le creció una hija sin saberlo.
Desperezada
Al despertar comprobó que esa noche había perdido su bostezo. Sus amaneceres, desde entonces, carecieron de fuerza para expulsar el hálito dañino de los malos sueños.
Paranomasia
El Flautista de Hamelin hizo sonar su flauta y todas las erratas le siguieron hasta ahogarse en el río de los correctores. Y nunca más hubo textos con errores.
Familia lectora
Poseía una gran biblioteca en la que pasaba muchas horas. Se encerraba rodeado de libros para empaparse de sus conocimientos como en un proceso osmótico. Un día desapareció dentro de ella. Desde entonces, la búsqueda de su familia es exhaustiva en el estómago de cada página escrita.
Antípodas
Las dos últimas personas que habitaban la Tierra estaba cada una al otro lado del planeta. Las dos comenzaron a viajar en la misma dirección en busca del remitente de un email que quería dejar de estar solo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)