El gorrilla

El gorrilla lucía en su camiseta, con grandes letras negras, la leyenda: Take is easy. Parecía una advertencia o una intimidación, quizás parte de su acervo filosófico o de una reflexión profunda, el discurso existencial de quien debe ganarse el pan, o la dosis de droga, cada mañana. Cuando bajé del coche, entre curioso y asustado, el gorrilla me extendió la mano y me dijo: dame algo que tengo hambre de letras.

No hay comentarios: